La nueva Jefatura de los Mossos d’Esquadra ha presentado este miércoles por la mañana su proyecto a los mandos del cuerpo en un acto en el auditorio del Complejo Central Egara. El nuevo comisario jefe, Josep Maria Estela, ha explicado que la reunión no es operativa, sino para presentarse y explicar a los mandos los cambios realizados hasta ahora.
También ha dicho que no ha venido para quedarse y que deben normalizarse los cambios, que se harán desde la máxima consideración y respeto hacia los mandos. Estela ha presentado el nuevo equipo: el comisario Eduard Sallent, la intendenta Rosa Bosch y la inspectora Montserrat Escudé, nueva portavoz.
La nueva Jefatura, por primera vez paritaria, ha agradecido en sus intervenciones el trabajo realizado por el mayor Trapero y toda la anterior Jefatura. El comisario Eduard Sallent ha destacado dos ejes donde se incidirá: cómo se distribuirán los efectivos de las nuevas promociones y modernizar el cuerpo para repensar cómo prestar el mejor servicio a la ciudadanía.
Su voluntad es impulsar el trabajo en equipo y empoderar a las diversas regiones policiales del territorio para abordar los problemas reales. Acabó diciendo que no ha venido para quedarse y que deben normalizarse los cambios, que se harán desde la máxima consideración y respeto hacia los mandos.
La intendenta Rosa Bosch ha destacado su intención de afianzar las relaciones con las instituciones e impulsar la proyección del cuerpo a nivel externo. Por su parte, Escudé hizo hincapié en lo que ha definido como elADN Mossos: la atención a la víctima y la proximidad.
Uno de los primeros cambios que ha hecho la nueva Jefatura es la destitución del intendente jefe de la Comisaría General de Investigación Criminal, Toni Rodríguez, que dirigía la estrategia contra el aumento del cultivo y tráfico de marihuana y algunos casos relevantes de supuesta corrupción política como los que salpican a la presidenta del Parlament, Laura Borràs, y el exconsejero de Interior Miquel Buch.