Más allá de la etiqueta de la ITV, los vehículos de cuatro ruedas tienen el vidrio delantero marcado con un adhesivo redondo. Es eletiqueta medioambiental que clasifica los vehículos según su eficiencia energética y el impacto que tienen en el medio ambiente. El objetivo que persigue este adhesivo es discriminar positivamente a los vehículos menos contaminantes y ayudar a las corporaciones municipales con las políticas medioambientales.
Está en funcionamiento desde el año 2016, y ya es habitual que todos los vehículos -sobre todo los de las ciudades y grandes municipios- lo lleven enganchado en la parte inferior derecha del cristal delantero. ¿Y las motos? ¿Existe un distintivo medioambiental específico para los vehículos de dos ruedas? ¿Es obligatorio llevarlo? ¿Dónde debe pegarse?
La Dirección General de Tráfico (DGT) no obliga a colocar el distintivo medioambiental en las motos, aunque recomienda hacerlo. Así, esta pegatina redonda existe también para los vehículos de dos ruedas, y hay ciudades en el que se comienza a pedir.
Al igual que ocurre con los coches, hay cuatro distintivos ambientales para las motos y ciclomotores. Eletiqueta Cero -de color azul-, reservada para los vehículos eléctricos y los híbridos enchufables con autonomía de más de 40 kilómetros. En segundo lugar, eletiqueta ECO -de color verde y azul-, destinada a las motocicletas híbridas no enchufables ya las enchufables con poca autonomía (por debajo de los 40 kilómetros).
También, siguiendo la normativa de los vehículos de cuatro ruedas, las otras dos categorías engloban a aquellas motocicletas y ciclomotores que funcionan únicamente con combustible. Primero, eletiqueta C -la verde- que deben llevarla los que cumplen las normativas de emisiones Euro 4 (2016) y Euro 3 (2006). Y eletiqueta B -la amarilla- para los vehículos más contaminantes, los que se adaptan a la norma Euro 2 (2003) de emisiones.
Los modelos que no se ajustan a ninguna de estas normativas quedan excluidos de la normativa medioambiental. Esto puede suponer un problema cuando las ciudades empiecen a aplicar restricciones. Así, aunque no sea obligatorio pegar, por ahora, el distintivo, es recomendable hacerlo para evitar restricciones.