Agentes de la Policía Municipal de Terrassa pillaron un vehículo que se había dado a la fuga después de provocar un accidente en la avenida de Josep Tarradellas, a la altura de la calle Transversal.
El otro vehículo implicado llamó a los agentes para informarles de que tras el accidente el conductor parecía bebido y se había marchado. Poco después, los agentes interceptaron el vehículo referido y sometió al conductor a la prueba de alcoholemia estimatoria.
En la primera dio un resultado positivo, con una tasa de 0,93 mg/l de aire espirado. Los agentes realizaron las pruebas evidenciales, con unas tasas de 0,82 mg/ly 0,78 mg/l, instruyendo diligencias por un presunto delito contra la seguridad del tráfico.
Además, al proceder a la comprobación de los datos, la dotación comprobó que al conductor le constaba la pérdida de vigencia del carné y que el vehículo presentaba la ITV caducada, interponiéndole las denuncias pertinentes por estos motivos.