Ridículo de dimensiones estratosféricas del Real Madrid, y, en especial, de Florentino Pérez. Kylian Mbappé ha comunicado la decisión de renovar con el PSG después de meses de especulaciones en las que todo el mundo en la capital del Estado, también la prensa, daba por hecha su llegada. Así pues, el delantero francés, con una buena oferta desde Qatarha preferido quedarse al lado de Neymar y Messi y no de Benzema y Vencidos. El PSG ha confirmado esta tarde la decisión del delantero francés con una presentación en el centro del campo, con el propio Mbappé y Al Khelaïfi, y un vídeo.
𝐍𝐨𝐭𝐫𝐞 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐢𝐫𝐞 𝐬’𝐞́𝐜𝐫𝐢𝐭 𝐢𝐜𝐢
𝐈𝐜𝐢 𝐜’𝐞𝐬𝐭 𝐏𝐚𝐫𝐢𝐬
🔴🔵 #KylianCestParis pic.twitter.com/LtCVEKeqis
— París Saint-Germain (@PSG_inside) May 21, 2022
Y es que para que quede Mbappé estaba obligado a renovar. Su contrato terminaba el próximo 1 de julio y el jugador lleva meses -incluso años- jugando a varias bandas para intentar hacerse con la mejor solución deportiva y económica. Pero el Madrid parecía un candidato lo suficientemente firme para llevarse una de las promesas -ya realidades- de mayor calidad del fútbol mundial.
El presidente de los blancos, la prensa deportiva de Madrid y el propio Santiago Bernabéu lo daban por sentado. Basta con ver y escuchar cómo despidió a la afición blanca a Mbappé el día que eliminaron el PSG de la Champions Leaguecompetición la cual jugarán la final la próxima semana contra el Liverpool.
El giro de los eventos del delantero francés envía a norris la planificación deportiva del Madrid, que se había apartado incluso de otras grandes operaciones como la deErling Haaland -que ha terminado en el Manchester City de Pep Guardiola– para centrarse en Mbappé. Por otra parte, toda la inversión destinada al pagar el sueldo del francés ahora Florentino deberá decidir en quien la desembolsa.