Cinco agentes de la policía española que se encontraban fuera de servicio salvaron la vida a un hombre que había sufrido un atraganto en un restaurante en el barrio de San Andrés de Barcelona. Le aplicaron la maniobra de Heimlich, que consiste en hacer comprensiones abdominales.
Según ha informado el cuerpo, los policías se encontraban en el local después de su jornada laboral, cuando uno de ellos observó cómo un cliente, de 55 años, se levantaba rápidamente, se ponía las manos en la garganta con dificultad para respirar y claros síntomas de estar ahogando.
Uno de los agentes se dirigió al hombre y le practicó la maniobra de Heimlich hasta que la víctima expulsó el alimento que le obstruía las vías respiratorias, mientras que el resto de policías se distribuyeron para asegurar la zona y llamaron en el teléfono de emergencias 112.